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La creciente concienciación medioambiental de la población y la administración de Marinhave S.A. está llevando a la empresa a poner en marcha una nueva actividad, el compostaje, como forma de responder al problema de los subproductos resultantes de la producción de compost, como el estiércol y las plumas no utilizadas, dando lugar a abonos orgánicos de excelente calidad.
El compost es un producto completamente esterilizado de bacterias nocivas para las plantas y el suelo. También está desprovisto de semillas que pudieran germinar tras su incorporación al suelo e infestar los cultivos con plantas no deseadas. Esto se logra gracias a las altas temperaturas alcanzadas en el interior del compost, llegando a temperaturas de 70º C durante periodos lo suficientemente largos como para garantizar la esterilidad y muerte de cualquier semilla existente en el compost.
Nuestro compost da lugar a un excelente abono orgánico que, por sus características químicas, permite corregir la MOH y el PH, y aplicar al suelo un alto nivel de macro y micronutrientes, sustituyendo así, en gran medida, la aplicación de abonos químicos.
Debido a sus características físicas, mejora sustancialmente la estructura del suelo, aumentando así la aireación y la capacidad de absorción de agua, reduciendo las necesidades de riego y los costes inherentes, así como la lixiviación de nutrientes.
Otra característica de este producto, y quizá la más importante, es la flora bacteriana que contiene y que es tan beneficiosa ya que aumenta la actividad del suelo y, en consecuencia, su productividad. Funciona como un inóculo para el proceso de humificación del suelo.
También puede utilizarse como sustrato para el enmacetado de plantas ornamentales, siendo un producto excelente para tal debido a su estructura.